LA PIEDRA DE AMASAR DE LA FAMILIA PEREIRA.
La palabra Mujeres o molieres proviene del latín, las que molían, las que ayudaban
en la cocina, las que hacían la comida; ellas están ligadas a la piedra, han
puesto el sudor y la fuerza, la resistencia, la resiliencia y la inmortalidad
que ellas representan; las mujeres como el granito que forma la piedra se
desgastan, se pulen, pero, casi nunca se rompen.
Nuestras mujeres son la piedra que soporta nuestras familias.
Esta piedra con sustancia alquímica legendaria recibió la fuerza de la mano de
mujeres aborígenes para amasar el maíz, moler el plátano y la yuca que
alimentaron a muchas generaciones Emberá catíos.
Esta piedra con historia milenaria es de granito puro, fue entregada por el
nativo Emberá Dobidá de la etnia catío Fabriciano Domicó (El indio
Fabriciano) como regalo de bodas a mi abuelo Ricardo Pereira Restrepo y Rosa
Amelia Gaviria Pérez en el año de 1930, en el corregimiento juntas de Musidó
(Rio verde).
Después de 1930 cuando llegó la piedra como preciado regalo, la fuerza de las
manos de la abuela Rosa Amelia Gaviria Pérez en su pulida concavidad
convirtieron el ancestral maíz y la leche en deliciosas arepas (pan de maíz) y
quesito, además de servir para amasar los buñuelos que fueron alimentos de oro,
elixir de vida para la familia Pereira Gaviria.
En el año 1958 las manos de Beatriz Yepes Roldán mi madre y esposa de Luis
Carlos Pereira Gaviria amasaron también el maíz, el quesito y los buñuelos que
sirvieron de alimento a la familia Pereira Yepes.
Nuestra piedra de amasar estuvo desde su inicio milenario en la rivera del Musidó,
luego, pulida por algún antepasado Emberá catío y después de ser regalada a la
abuela Rosa Amelia continuó en la finca Llano Chiquito en Juntas de Rioverde (Musidó)
hoy Nutibara desde 1930 hasta 1975, cuando nos trasladamos a vivir a Medellín, mi
madre la trajo a continuar su función de piedra de amasar.
A la fecha, después de casi 100 años de haber llegado a la familia Pereira, la
tengo en mi terruño (mi drúa) como recuerdo de la tierra, volcanes, ríos
y bosques, nuestros hombres originarios Emberá, nuestro pasado y nuestra historia
de familia.
Esta piedra milenaria de seguro fue testigo de momentos de la tierra y sus
volcanes, del agua del rio y del bosque que hicieron milagros para convertir el
granito en roca propicia.
Esta piedra en manos humanas fue testigo mudo de angustias y tristezas, de dolor y lágrimas, de nostalgias y sinsabores, de maltratos injustificados, de discriminación, pero también de alegrías de las mujeres Emberá, de la abuela Rosa Amelia, de mi madre Beatriz y de mi hermana Rosa Amelia quienes con su fuerza y sus manos convirtieron productos en alimentos y dieron amor en forma de comida, sazonada con abrazos y ternura a todas nuestras familias.
Palabras del idioma Emberá
Emberá o Eperá:
Hombre
Dobidá: vive cerca al rio.
Do: significa Rio
Bidá: significa que habita cerca
Domicó:
Apellido frecuente de la familia Emberá catío,
significa nacido en el rio.
Do significa rio;
Micó significa: nacido cerca a
Musidó: Rio Verde
Musi: significa Verde
Do: significa Rio
Mi Drua: mi tierra
CARLOS MARIO PEREIRA YEPES.
Feb 7 de 2021
Que historia más bonita y ademas lo bien contada,representa respeto y orgullo por los ancestros.
ResponderEliminarEspero poder un día conocer aquella piedra